El raspador de lengua

Un día del año pasado, mi compadre Miguel me llamó por teléfono para saludarme, cosa algo rara en el, para preguntarme si sabía de los raspadores de lengua. Una pregunta muy interesante ya que es un instrumento de higiene oral que no todas las personas la conocen. Para aquellos que nunca lo han visto, les anexo una fotografía.

La placa bacteriana es una película que se deposita en todas las superficies de la boca, especialmente en el dorso de la lengua porque su superficie es irregular. Dentro de esas irregularidades, la placa bacteriana se deposita y crece, creando una capa que en jerga odontologica se conoce como «saburra», y cuya presencia trae varias consecuencias: es fuente de microorganismos en la boca, mal aliento y sensación de suciedad. Usualmente, muchas personas se cepillan la lengua pero a veces eso no es suficiente. Si se tiene un raspador, basta con pasarlo como un «rastrillo» sobre el dorso de la lengua para despegar la saburra y finalmente cepillar la lengua como de costumbre. La unica precaución es la de no introducir demasiado adentro el raspador porque puede generar reflejo de vomito.

Yo tengo como 10 años de usar un raspador de lengua que casualmente se lo ví a una visita del extranjero. Desde entonces lo uso y se siente la diferencia en cuanto la limpieza, particularmente en esos días de fiesta y desvelos cuando uno se acuesta sin lavarse los dientes y se amanece con «aliento de dragón»: una pasadita del raspador en la lengua, un enjuague bucal, cepillarse los dientes y listo. Los raspadores de lengua hay de distintos diseños, diferentes a la fotografía, y se pueden comprar en cualquier farmacia grande, siendo GUM (sin hacer propaganda) la marca mas reconocida en el mercado. Así que compadre, ahí estan las explicaciones sobre el raspador de lengua, espero haber aclarado tus dudas.

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